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FRANK EINSTEIN: Walking silly since 2004

Bye-bye, old friend.

 


 

Nunca pensé que sería tan difícil decirle adiós a un coche, pero cuando te pasa, vas recordando qué es lo que ha pasado en ese coche, las experiencias y demás. Todo estilo Aquellos maravillosos años (con música de los Byrds incluida).

Mañana se llevarán al que fue Yagüemóvil durante 15 año* o así al desgüace. Un Seat Ibiza que ha vivido muchas cosas (el viaje a Murcia esde las más reseñables), y que estaba ya hecho un cascajillo el pobre (temblaba en cuanto te ponías a 120, no se le abría la ventana del copiloto, se le caían los retrovisores ¿verdad, Sergio?...) Pero tiraba aún. Aunque claro, ¿cómo se lo vendes a alguien?

-Pues sí, corre, tiene gasolina sin plomo, aire acondicionado, un elevaluna eléctrico... y poco más. La marcha atrás entra sólo cuando el coche quiere y la tercera rasca mucho. Y la dirección está dura durísima, te ahorras el gimnasio.

Pero claro. Yo he aprendido a conducir con este coche, he evitado mi primer accidente con él (un capullo que se metió desde la derecha saltándose la mediana y casi nos da a otro coche y a mí) y aunque es viejo, te acostumbras a sus manías, como si fuera una persona mayor.

Pues eso, adiós Ibiza. A ver cuándo llega tu sustituto y os lo presento formalmente por aquí.

* ¿Cuánto serán 15 años humanos en años de coche? En años perrunos son 105... pero en lo otro no lo sé. 

2 comentarios

yo -

yo ya me despedí de él...snifff. La verdad es que nunca llegué a superar la etapa del animismo (darle vida a cosas inertes: muñecos, coches...), soy más feliz así, pero también por eso me cuesta tanto desprenderme de las cosas...

Marina -

Me uno al emotivo adios. Es duro pero cuando os den el nuevo se os pasará rápido.
Un beso